La Virgen del Carmen es una advocación mariana que se venera especialmente en la Iglesia católica. Su origen se remonta al siglo XIII y está vinculado a la Orden del Carmen, una orden religiosa fundada en el Monte Carmelo, en Tierra Santa.
La Virgen del Carmen es considerada la patrona de los marinos y pescadores, así como de varias otras profesiones y grupos, incluyendo a la Armada y a la Aviación Naval en algunos países. Su nombre proviene del Monte Carmelo, en Israel, donde los primeros carmelitas se establecieron como ermitaños y desarrollaron su devoción hacia la Virgen María.
Según la tradición, la Virgen María se apareció a San Simón Stock, un prior de la Orden del Carmen, y le entregó el escapulario del Carmen, una insignia o medalla que representa la protección y la intercesión de María. El escapulario es considerado un signo de consagración a la Virgen y una promesa de protección y gracia especial para aquellos que lo llevan y viven una vida de devoción mariana.
La festividad de la Virgen del Carmen se celebra el 16 de julio en la Iglesia católica. Durante esta celebración, se llevan a cabo procesiones marítimas en algunas regiones costeras, donde los fieles llevan estatuas de la Virgen en barcos decorados y realizan actos de veneración y oración.
La Virgen del Carmen es representada en diversas formas artísticas, pero comúnmente se la muestra vistiendo un hábito marrón y llevando al Niño Jesús en sus brazos. En algunas representaciones, también se la muestra sosteniendo un escapulario.
La devoción a la Virgen del Carmen se ha extendido ampliamente por todo el mundo, y se le atribuyen numerosos milagros y favores. Es una figura de protección y consuelo para aquellos que enfrentan peligros en el mar y se considera una madre espiritual que guía y cuida a sus hijos en todas las circunstancias de la vida.