✨ Papa León XIV: Un Pontificado de Diálogo y Esperanza Global
Un nuevo capítulo en la historia de la Iglesia
El 8 de mayo de 2025, el Colegio Cardenalicio, reunido en un clima de oración y discernimiento, eligió como 267.º sucesor de San Pedro a Robert Francis Prevost, quien adoptó el nombre de León XIV. Esta elección histórica marcó un hito: por primera vez, un miembro de la Orden de San Agustín accedía al pontificado, y se convertía también en el segundo Papa del continente americano, tras el Papa Francisco, y el primero originario de América del Norte.
La elección de León XIV generó una ola de esperanza en todo el mundo, al simbolizar una Iglesia cada vez más universal, capaz de dialogar con las culturas del presente sin perder su identidad profunda. Su pontificado inicia bajo el signo de la unidad, la sinodalidad y la paz.
De Chicago al corazón de la Iglesia
Nacido el 14 de septiembre de 1955 en Chicago, Illinois (EE. UU.), Robert Francis Prevost es hijo de Louis Marius Prevost, de raíces francesas e italianas, y Mildred Martínez, de origen español. Desde joven mostró una fuerte vocación religiosa, formándose en el Seminario Menor de los Padres Agustinos. Más tarde obtuvo una licenciatura en Matemáticas y Filosofía en la Universidad de Villanova, en Pennsylvania.
Ingresó al noviciado de la Orden de San Agustín en 1977, hizo su primera profesión en 1978 y los votos solemnes en 1981. Fue ordenado sacerdote el 19 de junio de 1982 en Roma, tras estudiar Teología en la Catholic Theological Union de Chicago y obtener una licenciatura y doctorado en Derecho Canónico en la Pontificia Universidad Santo Tomás de Aquino (Angelicum).
Perú: Una misión que marcó su vida
Su misión en Perú transformó profundamente su vida pastoral. Durante más de una década, trabajó en Chulucanas, Trujillo y Chiclayo, sirviendo como formador, párroco, prior religioso y profesor de seminario. En Trujillo también fue vicario judicial y profesor de Derecho Canónico, Patrística y Moral. Atendió con entrega comunidades vulnerables y participó activamente en la formación de nuevos religiosos agustinos.
En 2015, su amor por el Perú se manifestó también con un gesto oficial: adoptó la nacionalidad peruana, como signo de identificación y cariño hacia el pueblo que había pastoreado con entrega.
Liderazgo eclesial y servicio en la Santa Sede
Fue Prior Provincial de su provincia agustiniana en Chicago y en 2001 fue elegido Prior General de toda la Orden de San Agustín, cargo que ocupó durante dos mandatos consecutivos hasta 2013. En 2014, el Papa Francisco lo nombró administrador apostólico de Chiclayo, siendo consagrado obispo el 12 de diciembre de 2014, fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe.
En 2023, fue llamado a Roma por el Papa Francisco y nombrado Prefecto del Dicasterio para los Obispos y Presidente de la Pontificia Comisión para América Latina, además de participar activamente en múltiples Sínodos y consistorios. Fue creado cardenal el 30 de septiembre de 2023, recibiendo el diaconado de Santa Mónica. En 2024 fue promovido al orden de los obispos, con el título de la Iglesia suburbicaria de Albano.
Un lema y una misión
El lema elegido por el Papa León XIV es “In Illo Uno Unum”, que significa “En el único Cristo, somos uno”. Esta expresión, tomada de un sermón de San Agustín sobre el Salmo 127, refleja el corazón de su visión eclesial: una Iglesia unida en Cristo, sin divisiones, dialogante, misionera y abierta al Espíritu.
Durante su primera aparición en el balcón de la Basílica de San Pedro, el Papa pronunció un mensaje lleno de esperanza, paz y gratitud, recordando la voz del Papa Francisco, expresando su deseo de construir puentes, y saludando con cariño a su querida diócesis de Chiclayo, a la que sirvió durante años.
Un pontificado con rostro latinoamericano y alma universal
El Papa León XIV inicia su pontificado como un hombre de puente entre continentes, con raíces norteamericanas y alma profundamente latinoamericana. Su experiencia en la vida religiosa, su compromiso pastoral, su labor como formador, su servicio episcopal y su liderazgo en la Curia Vaticana lo convierten en un guía preparado para los desafíos del siglo XXI.
Su elección representa un nuevo impulso para una Iglesia sinodal, cercana, que acoge, que dialoga y que no teme salir al encuentro del mundo. Con humildad y firmeza, el Papa León XIV encarna un liderazgo que mira con compasión a la humanidad, y que quiere ser instrumento de unidad, verdad y caridad para todos.